PREGÚNTALE AL EXPERTO TONY LARKMAN.

Tony Larkman

PREGÚNTALE AL EXPERTO TONY LARKMAN.

PREGUNTA:

BEGOÑA DEL VAL:

Me gustaría preguntar a Tony Larkman cómo podemos saber si el aceite del Árbol de té incluido en una formulación cosmética o terapéutica  es el auténtico árbol del te Australiano , ya que en el INCI no aparece este dato. 

RESPUESTA:

TONY LARKMAN:

Desafortunadamente los organismos reguladores de la Unión Europea (EU) tanto para cosmética como para productos terapéuticos no diferencias entre el árbol del té australiano del árbol del té procedente de otros países. En lo que a ellos respeta es árbol del té es árbol del té independientemente de su país de origen aunque sí hay el requerimiento  de que debe especificarse  en el INCI  en la etiqueta  con el nombre Melaleuca alternifolia (Tea Tree) Leaf oil. Esto implica que en la mayoría de los casos no podamos saber de dónde viene el TTO.

Hay algunos fabricantes que en sus etiquetas destacan que el TTO (aceite del árbol del té) que ellos usan es de origen australiano pero si no lo han comprado directamente a un productor certificado de Australia puede, algunas veces, no ser cierto ya que un intermediario puede fácilmente sustituirlo o mezclarlo y, desafortunadamente los fabricantes no dan los pasos necesarios para asegurarse de la calidad y pureza de la materia prima que usan. Compran por precio y esperanzados de que sea lo mejor.

ATTIA siempre ha trabajado en establecer un programa de certificación en el cual los fabricantes puedan usar el logo de ATTIA en sus productos. Para ello el fabricante debe ser un miembro de la ATTIA y garantizar bajo juramento que sólo usa 100% aceite del árbol del té Australiano es decir que está sujeto al Código de Prácticas (COP).  Hay una página web donde se encuentra una lista de estos fabricantes (https://attia.asn.au/certified_members.php). Como se puede observar en esta web muchos de ellos en USA han comenzado a usar esta certificación para demostrar que sus productos sólo contienen 100%  TTO australiano con la acreditación COP y que es producido por destilación al vapor de Melaleuca alternifolia.

Si uno quiere asegurarse de que el producto que está usando está fabricado sólo con el 100% de auténtico y puro árbol del té australiano, puede ir a la página de certificación https://attia.asn.au/certified_members.php y ver si la firma cosmética que usa está listada ahí. Si no lo está puede escribir al fabricante y preguntar.

Si su contestación no satisface puede pedírsele contactar con ATTIA Ltd para averiguar acerca del árbol del té con acreditación COP y 100% árbol del té australiano y puro procedente de la destilación al vapor  de Melaleuca alternifolia. Algunos de los fabricantes han comenzado a usar el logo de la ATTIA  en su etiquetado (Si ves ese logo, entonces es 100% aceite del árbol del té puro y australiano). 

ALGUNOS ANTECEDENTES COMO INFORMACIÓN:

De nuevo desarrollo es la implementación en la Unión Europea de la Ley de Registración, Evaluación, Autorización y Restricción de Químicos (REACH) en vigor desde el 1 de Julio del 2018 ( véase https://echa.europa.eu/regulations/reach/understanding-reach  para más información) para mejorar la protección de la salud humana y medio ambiental de los riesgos que pueden derivarse del uso de químicos. La Industria Australiana del Árbol del Té ha estado trabajando muy duro con la Agencia Europea de Químicos (ECHA) durante cerca de una década para asegurar que bajo la legislación REACH sobre TTO se describa y gobierne por lo establecido por el Standar ISO: 4730:2017 ( ver https://www.iso.org/standard/69082.html ) porque este es el mejor Standar para minimizar la adulteración en el aceite del árbol del té el cuál debería ser 100% puro y procedente de la destilación al vapor de Melaleuca alternifolia.

Desafortunadamente esto no siempre es el caso y la adulteración todavía se sigue descubriendo, la más reciente (diciembre 2018) proveniente de una gran compañía en Alemania. En teoría esta regulación debería asegurar que cualquier aceite de árbol de té importado de cualquier país en el mundo es, sin duda, 100% destilado al vapor de Melaleuca alternifolia pero no siempre sucede esto. A pesar de que  la incidencia de la adulteración del aceite del árbol del té en al Unión Europea ha bajado significativamente en los últimos 5 años ésta todavía sigue ocurriendo y ATTIA ha notado que desde la implementación del REACH el material adulterado es "mejor" de lo que solía ser por lo tanto la ley está ayudando (buenas noticias para los consumidores).

ATTIA también está actualmente trabajando con la Farmacopea Europea (Ph. Eur.) y al Farmacopea Británica (BP) para persuadirles de que adapten sus estándares para que encajen con el estándar de la ISO: 4730:2017. Ninguno de los dos estándares de estas dos farmacopeas en EU  han sido revisados desde 1996 (hace 22 años!). Ya que la mayoría del comercio en EU se rige por estos dos estándares y es muy vulnerable la adulteración de este material para que encaje en estos dos viejos estándares este paso es de vital importancia para proteger a los consumidores del fraude de la adulteración.

ATTIA está esperando que tanto la Farmacopea Británica como la Europea le conteste a principios del 2019. No fue hasta después de conversaciones mantenidas durante casi 10 años sin ningún progreso hasta el 5 de julio del 2018 con la implantación del REACH que a la ATTIA se le han pedido muestras, métodos y fechas para poder ayudar al comité de expertos de estas dos Farmacopeas para revisar los estándares que siempre deben mantenerse revisados.

Si la BP y la Ph Eur actualizan sus estándares, entonces, por primera vez desde más de una década habría la posibilidad de que tanto en EU como en Australia (donde el estándar BP todavía es usado por la Administración Australiana de Buenas Prácticas or TGA) se pudieran enjuiciar a los responsables. Esto sería un gran avance para los productores del aceite del árbol del té, los fabricantes que quieren hacer las cosas bien y, por supuesto, para los consumidores que estarían protegidos de los comerciantes y fabricantes sin escrúpulos. 

TONY LARKMAN.

CEO ATTIA.

 

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